¡No faltan médicos!
Llevamos tiempo, mucho tiempo, demasiado tiempo, oyendo a nuestros gestores y políticos gritar contra viento y marea que faltan médicos.
Como muchos ya sabréis, hoy en día, para entrar en medicina es necesario sacar una excelente calificación en la EBAU. Una vez superada esta prueba, el estudiante debe enfrentarse a 6 años de carrera. Con un poco de suerte, tras un año de preparación del examen MIR (Médico Interno Residente), si aprueba, elige su especialidad y realiza su formación, en nuestro caso en la ESPECIALIDAD de Medicina de Familia y Comunitaria durante 4 años.
Facultades de medicina
En el año 2008, en España había 28 facultades de medicina de las que salían, cada año algo más de 3.500 médicos. Once años después, contamos ya con 42 facultades de medicina (y 6 más en proyecto) de las que se gradúan cada año algo más de 7.000 médicos. Somos el segundo país del mundo con más facultades de medicina , solo por detrás de Korea.
El MIR
El Ministerio de Sanidad en los últimos años, ha convocado menos plazas para realizar la formación especializada MIR que médicos finalizan la carrera. Esto ha hecho posible que se vaya creando poco a poco una bolsa de médicos sin especialidad, así este año 2019 se van a presentar 15.400 aspirantes para optar a una de las 6.813 plazas MIR que oferta el Ministerio. Durante estos años, al no ofrecer el mismo número de plazas MIR que número de estudiantes terminan la carrera, la administración ha conseguido crear una bolsa de médicos sin especialidad, como ya ocurrió en los años 80, y como describe de manera precisa Juan Simó en su blog, al hablar de “El petróleo barato”. Si bien es cierto que alguno de estos médicos dispone ya de una especialidad y se presenta nuevamente al MIR para optar a una segunda especialidad, cerca de 7.000 médicos no pueden trabajar en el Servicio Público de Salud al no disponer de ninguna especialidad (Directiva Europea 86/457).
¿Qué me espera después del MIR?
Pero tras mucho esfuerzo, consiguen aprobar el MIR y …¿qué ocurre después de 4 años, una vez terminada la especialidad? Hemos formado posiblemente a unos de los mejores Médicos de Familia de Europa ¿Y qué les ofrecemos? La administración les ofrece contratos precarios, de guardias, un día en un sitio, otro día en otro. No libran las guardias y deben hacer jornadas de 31, 37 o 48 horas ininterrumpidas. No disponen de calendario laboral, por lo que no saben dónde van a tener que ir dentro de 3 días. Por supuesto, pueden olvidarse de conciliar la vida familiar y laboral pudiendo realizar jornadas mensuales de 250-300 horas. Ven el ejemplo de los médicos de familia más mayores que tienen que poner su propio coche y pagar la gasolina de su bolsillo para desplazarse de un pueblo a otro. Ven que tienen que atender a 50-60 pacientes al día disponiendo de apenas 4-6 minutos para cada uno, ven que cuando un compañero se va de vacaciones, el resto de médicos debe “acumular” su cupo (es decir, tienen que atender a sus pacientes y a los pacientes del compañero o los compañeros que se van de vacaciones) porque la administración dice que “faltan médicos”.
¿Y Europa?
Y les llama un amigo y les cuenta su experiencia por Europa. En Suecia, el sueldo del médico es el doble que en España, trabaja 3 semanas al mes y cada día de trabajo atiende a un máximo de 10 pacientes. O en Reino Unido, también con sueldos que doblan al nuestro y con unas condiciones laborales muy lejos de las que aquí tenemos (15 pacientes al día, tiempo para formación, docencia, ¡la hora de guardia entre 5 y 8 veces superior a la de España!), y le ofrecen hasta alojamiento. En Alemania, hasta 3 veces el salario de un médico en España con facilidades de todo tipo para integrarles en su comunidad…
Y esto es lo que sucede, somos una potencia mundial en exportar médicos.
Formar durante 6 años a un estudiante de medicina, según la Conferencia Nacional de Decanos de Facultades de Medicina Españolas, cuesta a las arcas del Estado cerca de 200.000 euros. Y según el Informe Anual del Sistema Nacional de Salud de 2016, formar a un MIR cuesta cada año unos 40.000 euros. En el caso de Medicina de Familia, 4 años de formación costaría a la administración 160.000 euros. Con todos estos datos sabemos que formar un médico de familia en España nos ha costado cerca de 360.000 euros y cuando el médico está preparado para que revierta en nuestra Sanidad todo lo aprendido, no somos capaces de ofrecerles contratos dignos y los países de nuestro entorno se benefician de esa excelente formación que hemos dado a nuestros jóvenes médicos de familia.
Se van de España más médicos que nunca. En 2018 se han solicitado a los Colegios de Médicos 3.525 certificados de idoneidad (documento imprescindible que capacita para trabajar en Europa como médico). Desde 2011 a 2018 se han pedido 23.493 certificados de idoneidad. Si multiplicamos el dinero que cuesta formar a un especialista en España por los médicos especialistas que se han ido de nuestro país, obtenemos una cifra escandalosa que no nos atrevemos a plasmar aquí. ¿Nos sobra el dinero?
No faltan médicos, los médicos huyen de unas condiciones laborales que dificultan enormemente desarrollar aquello para lo que durante tantos años se han formado.
Con las jubilaciones, España perderá 16.000 médicos de Primaria en los próximos 10 años.
Reino Unido necesitará 5.000 médicos más para 2020 e Italia perderá 45.000 en los próximos 5 años. ¿De verdad estamos dispuestos a que se nos vayan?
¿Soluciones?
Pero la administración ya se ha puesto a trabajar y ha puesto sobre la mesa 2 “soluciones” ingeniosas:
1- En Castilla y León ya han propuesto la contratación de médicos recién graduados sin formación MIR aunque parece ser que hoy se han echado a tras, y en Andalucía llevan tiempo haciéndolo. Recordamos que para ser médico de familia debes realizar 4 años de formación especializada. Es ilegal contratar médicos en el Sistema Público de salud sin la especialidad MIR; el Real Decreto 931/1995, que a su vez es una exigencia de la Directiva Europea 86/457, así lo establece.
2- Transferir a las Comunidades Autónomas la capacidad de homologar títulos de medicina obtenidos en el extranjero. Cada CCAA podrá homologar todos los títulos que quiera, así nunca les faltarán médicos. Formamos a los mejores médicos del mundo, para que después otros países disfruten de ese potencial, mientras que nosotros traeremos a otros que puedan aguantar las condiciones laborales que aquí tenemos, pero nuestros pacientes…..¿soportarán esas condiciones?
Quizás nuestros gobernantes no se den cuenta que la solución más necesaria pasa por hacer contratos dignos, dignos para los profesionales y dignos para los pacientes.
¡Qué no se vayan!
Mañana se reúne la Dirección con los residentes de medicina de familia que terminan este año. Tienen una ocasión de oro para demostrar que verdaderamente se preocupan por la Atención Primaria de La Rioja.
¡No dejéis escapar a ningún médico de familia más de La Rioja y esforzaos en traer de vuelta a todos aquellos que durante años se han ido de nuestra región!
¡No faltan médicos!
No faltan médicos, no faltan médicos, no faltan médicos